viernes, 6 de julio de 2012

Mariscos Toño II



El sitio se antoja para ser recibidos con alegres cumbias de antaño, algo guapachoso estilo Chico Ché y la Crisis, Mike Laure o el Acapulco Tropical; pero no, hay un silencio monacal salvo si se está televisando algún partido de futbol y eso si es de interés de Toño, fuera de ello sólo podremos escuchar la charla de los comensales o al anfitrión saludando a alguno de los bastantes clientes de antaño, pero eso es lo de menos, lo que importa es el sabor.
Como con el resto de las cosas el absolutismo no aplica en materia de restaurantes y no se puede decir que exista el mejor de mariscos, pero lo que sí se puede es confirmar que las mejores tostadas de San Luis Potosí son las de Toño II. Para la sed hay que comenzar con una cerveza preparada -si se va con algún grado de cruda es imprescindible-, una Modelo con un poco de pulpo y camarón bañados con limón y salsa Valentina. Los cocteles son bastante respetables, pero como decía el verdadero asunto está en las tostadas, las de camarón y pulpo, las de ceviche poco menos. Yo prefiero irlas pidiendo de una en una para evitar que se remojen y estar levantando los pedazos del plato, más vale así aunque el mesero pueda desorientarse un poco.
De ahí hay que pasar a las jaibas rellenas, en frío como toda la cocina del lugar pero igual de buenas, de preferencia con salsas inglesa y maggi y doble aguacate para darle más punch al asunto. A todo esto hay que pedir que te pasen los habaneros en escabeche, ya que no los tienen con el resto de las salsas de la mesa pero son necesarios si quieres que la experiencia sea completa, pican como el demonio así que hay que usarlos con respeto o limitarse a las zanahorias, que ya de entrada son rudas. Por cierto en ese mismo lugar mi amigo Javi, quien ahora vive fuera del país y sufre las debilidades de los chiles en gringolandia que saben a pepinillos me comentó que suple esta carencia haciendo en casa su preparado: se ponen en un frasco o vitrolera algunos chiles habaneros con rebanadas de zanahoria, cebolla, un diente de ajo, hojas de laurel, granos de pimienta (y otras especias si gustan), sal al gusto, se llena con vinagre blanco, se cubre y en unos cuatro días tendrán sus chiles caseros, hay quien gusta de cocer un poco los ingredientes antes, pero ya depende del gusto.
En fin, regresando al tema esperen a su resaca más próxima y desaparézcanla con el deleite de unos mariscos preparados a conciencia, como siempre la genialidad radica en lo sencillo, en una tostada que retiemble en sus centros tu cruda y reintegre la fuerza para seguir con esta vida.
Toño II se encuentra en la calle 4 de la colonia Industrial Aviación de San Luis Potosí en el norte de la ciudad, zona gastronómica a la que habrá que dedicarse por separado, sobre todo al Saucito, ya habrá tiempo de eso. Los precios son amigables, con 150 pesos uno sale satisfecho y como si nunca hubiera cometido en su vida excesos.